AMANDO A UN VAMPIRO CAPITULO 5

Esta historia le pertenece a Kassi en su blog “Luz de cristal”

Espero que os guste y dejéis vuestros comentarios.

SEDUCIR NO ES TAN FACIL

Summary: Porque el amor puede llegar a ser difícil y si no que se lo digan a la familia Cullen, amantes de vampiros... (vampiros&humanos) 

Clasificación: T

CAPITULO 5

POV Edward

Cuando llegue a la Universidad pensaba en el extraño comportamiento de Bella, había comido e el restaurante pero parecía no gustarle la comida y en la cafetería todos los días le ocurría lo mismo. Hoy estaba nublado aunque las nubes no eran muy consistentes, seguramente saldría un poco el sol.

Llegue a clase y Bella ya estaba en nuestro pupitre con cara de preocupación. Me senté a su lado mientas la saludaba con una sonrisa, ella me sonrió pero, no era felicidad lo que transmitía su sonrisa.

En clase solo pensaba como era ella, piel fría, pálida, no comía apenas y si lo hacia no le gustaba, mi mente dibagaba por muchas locuras de las cuales hubo una que me llamó la atención "vampiro", yo era un fantasioso y creía en lo extraño pero esto era demasiado y en Bella ni yo lo creía, quizás solo fuera falta de alguna vitamina para la piel que explicara su falta de color y lo poco que le gustaba la comida.

Salíamos de la clase cuando un rayo de sol se filtro por la ventana dando de lleno en la cara de Bella, que se ilumino como pequeño cristalitos, ella horrorizada salio corriendo hacia el baño, yo estaba un poco preocupado pero cuando la vi salir no le pregunte, ni le mencione nada.

Quede con Bella por la tarde para terminar el trabajo de Biología juntos.

Llegue a casa cansado de mis pensamientos apenas lo suficientemente atento como para saber lo que hacia, así que decidí probar con la teoría mas descabellada. Subí a mi cuarto en busca del ordenador, lo abrí y busque información sobre vampiros. En cierta manera muchas cosas de las que aberiguaba encajaban con cosas sobre Bella, pero aun así no lo creía, seguramente lo que tenia era paranoia. Bella llamo a la puerta y la abro intentando olvidarme de mis pensamientos.

-Hola-dije esforzándome para sonreirle.

-Hola-me respondió no muy convencida.
Hicimos el trabajo sin problemas pero cuando terminamos los pensamientos de lo que ella podía ser volvieron.

-Eres diferente ¿verdad?-dije sin pensar. Ella parecía sorprenderse y se puso aún mas pálida de lo que era.

-¿En que sentido?

-Eres diferente, si quieres llámame loco pero encajas en la etiqueta de "posibles vampiros" y no es porque sea un fanático obsesionado ni nada de eso, es porque eres fría, pálida, no comes y cuando lo haces pareces tener arcadas y además brillaste al sol.

-¿te horrorizaria la verdad?-me preguntó.

-Claro que no, quiero saberlo todo.

-Si soy diferente.

-¿Eres un vampiro?

-Si lo soy, pero no te preocupes no por un momento te he querido hacer daño.

-Te creo-le prometí.

POV Bella

Aún seguía pasmada ante Edward después de haberle dicho mi secreto, era como si hubiera traicionado a mis amigos porque seguramente llegaría a la conclusión de que yo no era la única.

No podía creer que se lo había dicho pero ya daba igual porque ya estaba echo además ya estaba previsto de antes si no que sentido tenia la visión de Alice lo único era que yo no lo esperaba tan pronto, apenas nos conocíamos de unos días, pero era como si nos conociésemos de antes.

Edward seguía paralizado, parecía como si su cerebro intentara asimilar una información, lo que yo le había dicho era algo difícil de entender para cualquiera, claro que el había llegado a la conclusión de lo que yo era, y el solo o por lo menos eso esperaba yo.

-Tu no eres la única ¿verdad?-ya llegaba la parte mas difícil-quiero decir ¿Alice y Emmett también lo son?.

Alice me perdonaría por contarle esto a Edward por que sabia lo que estaba pasando y que me jugaba mi amor pero en el caso de Emmett ese iba a ser un ligero problema.

-Si, ellos también lo son, Edward no le tienes que decir a nadie lo que soy o tendré que irme y nunca te volveré a ver.

-¡NO!, yo no se lo diré a nadie te lo prometo.

-Gracias-le dije.

-No, gracias yo a ti por decirme la verdad y compartir tu secreto, con un semi-desconocido como yo.

-¿Sabes?, no me siento así contigo es como si te conociera de antes.

-Ya somos dos-me dijo sonriendo.
Estábamos es la habitación de Edward, era muy amplia y nuestro trabajo esta sobre el escritorio apenas era de 50 paginas que era la media del profesor y yo no paraba de dar vueltas con la mirada a través de la habitación, estaba nerviosa sentada en la cama blanda y con Edward a mi lado.

Entonces el me cogió de la mano y me beso los nudillos me acerco a él lentamente y me abrazo.

-Gracias de nuevo-empecé a respirar alocadamente por su cercanía, me ponía nerviosa pero me sentía bien en sus brazos rodeada por ellos. El noto mi forma de respirar y me dijo

-Tranquila-me volvió a besar pero esta vez en la cabeza mientras me acariciaba la espalda y jugaba con mi cabello. A pesar de tener que haber contado el secreto, por estos momentos eso valía la pena. En mi corazón algo decía que lo amaba, yo nunca había confiado tanto en un hombre que no fuera mi hermano, su contacto me hacia estremecer era tan condenadamente tranquilizador y bueno conmigo.