DESCUBRIENDO A LOS VULTURIS EPILOGO

Esta historia es de Kassi cuyo blog es http://kassicrepuculera.blogspot.com

Hoy os cuelgo el epílogo de la historia, con esto queda terminada

Espero que os haya gustado y dejéis vuestros comentarios.

DESCUBRIENDO A LOS VULTURIS

Summary: Bella es una vampira en el grupo de los vulturis ¿Qué hará cuando la manden a destruir a los Cullen por un secreto?

 

Epílogo

POV Edward

Tras entrar de nuevo por la puerta de los pasadizos y llegar hasta la imponente puerta de la habitación donde se encontraba los Vulturis, estábamos todos deseando entrar; y yo me sentía totalmente tranquilo, pero como sabia que eso no era posible mire a Jasper quien debía de estar controlando las emociones de todos.

No hacía falta mencionar cuan harto me sentía de este sitio infernal, Félix nos indico que entráramos y yo cogí la bolsa con los restos de Hayaqui para enseñarles las pruebas a los 

 Vulturis, mientras que Emmett hacia lo mismo y los demás entraban con cuidado a la sala.

-Hola amigos, ¿Qué traéis ahí?-pregunto Aro interesado sin andarse por las ramas.

Con ese tono petulante y esa cara de sorprendido, estaba realmente gracioso, yo solo sonreí de lado y deje la bolsa en el suelo, cerrada.

Cada miembro de la familia saludo a su forma, y de nuevo uno de los impacientes Vulturis pregunto.

-¿Qué hay ahí?-esta vez era Cayo, su cara no tenía ninguna expresión como si todo esto le importara poco, aunque no fuera así, como bien sabia yo por sus pensamientos.

Por los visto aun no le habían conseguido una sustituta a Bella para el puesto que quedaría vacante, ¿de verdad pensaban que no lo íbamos a conseguir?, que mal nos conocían entonces.

-Una sorpresa-murmure, mire a mi hermano Emmett y asentí, abrí la bolsa yo primero dejándoles ver, los brazos y las piernas de un irreconocible Hayaqui.

-¿Sera posible?-susurro Marco ahora si impresionado.

De nuevo mire a Emmett y él abrió la bolsa que había a sus pies, la cabeza de Hayaqui cayó de ella rodando hasta los pies de Heidi.

-Ese es…-hizo una mueca de repulsión y pateo la cabeza.

-Por favor, Heidi, no maltrates el valioso trofeo de los Cullen-dijo Marco mirándolo sonriente.

-¿Cómo habéis conseguido atraparlo?-pregunto Aro.

-No fue del todo fácil pero se consiguió con un poco de táctica de guerra y algunos planes-contesto Carlisle a mi espalda.

-Por nuestra parte el trato ya está cumplido-se adelanto a decir Bella.

-Ajá, y por el nuestro ya lo está-contesto Aro dando unas palmadas.

Magnifico-se limito a decir Cayo.

-Poderoso-contesto Marco, su mirada era obviamente critica, pues seguro pensaba que nuestro poder había sido subestimado y que tan pronto como pudiéramos la tomaríamos contra ellos, pero nosotros éramos gente pacífica queriendo vivir en paz.

-Amigos míos, realmente me dejáis estupefacto ante tal muestra de poder-dijo Aro mirándome, alzo una mano y pidió el contacto de nuestras pieles.

Me acerque a él cansado de los Vulturis, tenía claro que una vez que quedáramos libres no volvería a acercarme a Volterra en una buena temporada.

Tomo mi mano y me miro a los ojos antes de cerras los suyos y sentir ese remolino de imágenes y pensamientos en mi mente, viendo todo lo ocurrido, observando desde las sombras de mis pensamientos.

La escena en la que Bella dijo todo el plan fue crucial para él, me soltó la mano y me miro a mí un segundo para después mirar sobre mi hombro.

-Sabia que Bella era un material valioso para nosotros, pero un trato es un trato-contesto sin ningún ánimo, yo volví a mi lado junto a Bella, tranquilizándola.

Aro miro a nuestro alrededor como buscando algo, casi se me había olvidado ya la falta de nuestro nuevo amigo.

-¿Y Demetri?-nos pregunto.

-Consiguió lo que quería, un amor-respondió Bella mirando al suelo.

-Ah, con qué era eso…y ¿Cómo no se atrevió a regresar?-pregunto de nuevo aquel vampiro despiadado y calculador.

-No sé, supongo que creyó que con Hayaqui muerto tendrías suficiente-respondí yo, dejando que Bella se quedara de lado.

-Él creyó…-repitió pensativo-creo que deberíamos de tomar medidas en este asunto, un miembro de los Vulturis no puede dejarnos de lado así como así-contesto Cayo, visiblemente molesto.

-Matamos a Hayaqui, ¿Por qué no hacéis la vista gorda y dejáis a Demetri en paz?-pregunto mi Bella.

-Eso no es típico de nosotros-contesto Marcus.

-Espera-dijo Aro-le dejaremos en paz…pero no será gratis, nos deberá un favor y ten por seguro que ninguno de nosotros olvida nunca nada-se hizo el silencio en la sala, Cayo y Marcus no parecían muy contesto con esa decisión pero las respetaban y en cierta manera era un buen plan, porque quizás algún día necesitaran ese favor como nos necesitaron a nosotros para vencer a Hayaqui.

-¿Podemos irnos ya?-pregunto Bella impaciente.

-¿Tan pronto?, acabáis de llegar-opino Cayo.

-¿No os quedareis para comer?-dijo riendo Marco.

-No, gracias pero ya sabéis de nuestra dieta-contesto Carlisle amablemente.

-En ese caso, un gusto haberos tenido hoy aquí con nosotros, sobre todo porque nos quitamos un peso de encima con ese Hayaqui-dijo Cayo, creo que nos estaban echando de allí disimuladamente pero me daba igual yo estaba deseando irme de allí lo más pronto posible.

Toda mi familia y yo nos dimos la vuelta, esperando irnos lo más pronto posible de allí.

-Esperad, queremos que os hagáis cargo de este tipo-dijo Aro antes de irnos, todos nos dimos la vuelta soprendido ante tal petición, ni siquiera sabíamos de quien se trataba.

Chasqueo los dedos, y Félix salió de la habitación un momento, cuando volvió traía agarrado del cuello a Chase, algo asustado.

-Tengo entendido, que este tipo os conoce-dijo Félix, tirando a Chase hacia nosotros.

-Sí, ¿Qué hizo?-pregunte sorprendido de que estuviera aquí junto a ellos.

-Llego a Volterra hace un par de semanas y no se le ocurrió nada mejor que matar a un humano en nuestra ciudad, claro está cuando Jane lo vio, nos lo trajo de inmediato y no sabíamos qué hacer con él…-dejo la frase sin terminar, dejando claro que habían pensado algún futuro nefasto para él.

-Le preguntamos cuál era su clan o si conocía algún otro vampiro que quisiera enseñarle un buen comportamiento-añadió Aro-solo nos respondió “Los Cullen”, y ya que vosotros veníais de camino le hicimos el pequeño favor de esperaros…, pero está vetada su entrada hasta que no sepa cómo comportarse-apostilló.

-Nos aremos cargo de él-contesto Carlisle esperando a que Chase se acercara a nosotros para irnos ya de una vez.

“Me libre por poco”-pensaba Chase caminando rápidamente hacia mí, casi corría.

“¿Cuándo nos dejaran ir?”-se preguntaba Alice nerviosa una y otra vez, Jasper a su lado nervioso por los sentimientos de ella intentaba tranquilizarse a sí mismo y a los demás, con la intención de aligerar el ambiente.

-Ya os podéis marchar-las frase mágica salió de la boca de Marco como un barco salvavidas, todos nos aferramos a esa idea mientras salíamos de aquella especie de castillo subterráneo.

Cuando por fin estuvimos en afuera, en las calles arropados por un manto de oscuridad que poco a poco engullía el sol en el cielo; por fin a estábamos a salvo de esas miradas indiscretas y los comentarios poco juiciosos de los Vulturis.

Yo mire a Chase quien ya estaba preparando mentalmente algo así como una excusa con la intención de que Carlisle le dejara volver junto con nosotros y disfrutar del poco cariño que le brindaban unos Vampiros en todo el universo.

-Volverás a ser de la familia-le murmure.

-¿Crees que os pedirán algún favor por la pérdida de ese tipo?-me pregunto de improviso.

-Seguramente, como ya escuchaste, los Vulturis nunca olvida…supongo que cuando pasen algunos años recordaran-le conteste restándole importancia, aunque si tenía importancia si deseaban algo como masacrar a alguien de nuevo.

Bella se acerco a mí y me abrazo por la espalda mientras que Chase se acercaba lentamente a mi padre para comenzar con el discurso, yo solo me concentre en mi hermosa Bella, la que tenía antes mis ojos, con sus sonrisa y sus labios carnosos esperándome; me olvide de cualquier pensamiento pesimista ante tal situación y me deje arrastrar por la felicidad que me embargaba estar a su lado

-Te amo, Edward Cullen-me susurro antes de besar mis labios deseosos de disfrutar de su contacto.

-Y yo mi pequeña vampira…-le dije besándola con pasión, la abrace consiguiendo que mi cuerpo se sintiera en su sitio, mientras que observaba como de nuevo el sol se iba tras las montañas dejando paso a un nuevo anochecer avanzando incesantemente recordándome que por muchos problemas que existieran el tiempo pasaba sin ninguna expectativa de que fuese a parar nunca.